Crónica Maratón de París – Luís Calero

Hola runners!!!

Os adjunto la apasionante crónica de nuestro compañero Luís Calero y su hazaña «2 maratones en 1 mes». Enhorabuena campeón, ha sido todo un placer poderos seguir todos estos meses desde el blog, chapeau!!!

Cuando el viernes vas a buscar el dorsal de la maratón del domingo y en las escaleras del metro resoplas como una cerda de parto, las sensaciones no son malas. Son horribles. Un catarro que empezó hacía 10 días seguía allí, sin pinta de mejorar. Y ya no había tiempo de más. Sí, sí, me como el coco (“en carrera será diferente..”, “igual me sirve para despejar vías respiratorias y voy como un tiro…”, etc) pero la cruda realidad es la que es. (Calla!, que el Barça gana, buena señal. No duermo porque me ahogo, mala señal). La tensión previa es fuerte.

Salí como siempre. Control del pulsómetro y dejar pasar kms. Llegué a la media como en las dos últimas: 1:39 (en las que hice tiempo final:3:15). Sabía que hasta aquí la cosa iría bien. Ya dije en el post que a partir de 145 ppm no podía respirar bien. Y claro, en la maratón es a partir del 25k cuando has de subir pulsaciones para mantener la velocidad. Y claro, no podía. Una batalla para ir lo más rápido posible sin tener que pararme a toser y recuperar aliento. Datos: Barcelona, crono:3:15:20; media de pulsaciones: 158. En París, crono:3:23:03; media de ppm:148!!. Diez menos!!. Con estos números se deduce que estuve de turista. Un paseo. Falta la variable: enfermedad. Si un mes antes hacer 3:15 me resultó un “entreno largo” y acabé sobradillo, esta vez os juro que ha sido una pesadilla (de hecho, las imágenes que recuerdo de la carrera son como irreales). Podía haberme dejado caer (no tengo nada que demostrar a estar alturas, pero acabar en 3 40 y pico me hubiera dejado el cuerpo casi igual de hecho polvo, pero sensación de fracaso.. Apreté los dientes, a pesar de que cada km el crono no reflejaba el esfuerzo inhumano que estaba dando, pero no paraba de adelantar gente (único punto positivo). Meta, medalla y liberé toda la tensión previa y de la carrera sentado solo en un bordillo , rodeado de miles de corredores, con una lágrimas y sorbiéndome los mocos. Así la batalla ha sido muy dura. No la repetiría por nada del mundo. Pero me siento ganador.

Está claro que había sido poseído por el diablo, personificado en un inmenso moco verde. Estuve toda la carrera sacando una inmunda cosa verde por varios orificios de mi cuerpo (nariz y boca) y hablando en lenguas extrañas (SpanFranglish) ante el horror del resto de corredores. Lástima que no había ningún exorcista en carrera. Y sigo con ello. No os extrañe si en la Cursa de Bombers mi cabeza gira sobre sí misma como una peonza.

Ahora toca descansar (Cursa de Bombers, Cursa Port Aventura,…,etc) y empezar a preparar la siguiente cita importante: 25 de Julio 2010. Duathlon International Longue Distance de Fos (Francia). Uuuf!

Creo que sería interesante que, aparte del “iba-bien-me puse fatal-pero-conseguí-acabar” (no lo dije de Bcn ni del Mediterrani porque fue todo rodado), dejáramos una especie de ficha de la maratón que pueda ser útil para los que quieran correrla en adelante. Propongo la siguiente y que cada uno la adapte como quiera:

MARATON EXPO:  Multitud de expositores, aunque pocas novedades. Mención especial al merchandising de ParisMarathon, había para dar (poco) y vender (caro). Está situado lejos de la salida del maratón,pero a tiro de metro. Para los dorsales y xips (no vale yellow xip) ninguna cola, eso sí, el que no haya aportado certificado médico de aptitud antes lo debe presentar allí mismo, si no no hay dorsal. La comida de la pasta bien, en calidad y cantidad, pero paga todo dios 3€, corredores y acompañantes. Alguien (je,je) distribuyó publicidad de la MCD por todos lados (y no fui el único). Ojo!, te dan una esponja para que la lleves encima y remojes en cubos. Si te olvidas, te j… porque no te dan (yo me la olvidé y me costó muchos kms encontrar una por el suelo que alguien había perdido..) También te dan una brida para el xip. En meta te la quitan los voluntarios con alicates (usad la brida, o cortarán los cordones)

SALIDA MARATON: Acceso en metro al Arco de Triunfo que está equidistante de la salida y la meta. El metro atestado de corredores, la mayoría cambiados y con el dorsal puesto era para filmarlo. Llegamos 1 hora antes. Da tiempo de cambiarse (en la calle), dejar la bolsa en guardarropa (sin colas ni antes ni después) y llegar al cajón de salida , pero no sobra nada.

RECORRIDO: Totalmente llano. La salida de Campos Elíseos es en ligero descenso. Nunca había corrido con tanta gente y os aseguro que la experiencia no es nada agradable. Supongo que para los primeros y para los últimos que, habitualmente van solos, debe ser guay estar rodeado de más gente, pero todos los que vamos entre poco más de 3 horas (como iba yo) y  poco menos de 4 horas (que no me lo quiero ni imaginar) es una tensión extrema. Imposible correr a tu ritmo. O vas haciendo eses para adelantar o te pasan literalmente por encima para adelantarte. O te vas a los bordes con el riesgo de comerte una señal, una valla o alguien del público. Hasta el 15k no se crea un ritmo homogéneo, con muchísima gente, pero sin tanto peligro. Detalle a mejorar: los avituallamientos están en un solo lado del trazado (izda o dcha, varía) con la consiguiente procesión de gente cruzándose para buscar agua y para salir del avituallamiento. Caótico. Yo iba delante, pero en los de 3:30-4:00  debe ser la guerra total (lógico, porque en una maratón el avituallamiento es simple ley de supervivencia).

Pasas por todos los lugares emblemáticos de la ciudad, Concordia, Louvre, Rivoli,..llegas a un gran parque (Vincennes kms 8-15 ) y vuelves dirección a la salida por Bastilla y paralelo al Sena. Los único sube-baja están en los puentes del Sena entre 23k y 29k y muscularmente se notan, hasta llegar a la altura de Eiffel. Giro al Oeste hacia el Bosque de Boulogne donde se libra la auténtica ballata del maratón : los kms treinta y pico. Llano, árboles, arcenes de tierra, avituallamientos completos,… y dolor. Hasta llegar a una rotonda y, de pronto, ARRIVÉ. Está bien, porque cuando ves la meta desde muy lejos, se hace eterno el “paseíllo”. Aquí te la encuentras.

LLEGADA: Los voluntarios se encargan del xip (no tienes ni que agacharte, bueno yo sí porque lo llevo en un brazalete de triatlón), te dan la medalla (grande y “de oro del que cagó el moro”) y hay un pequeño aperitivo:agua, powerade, banana y naranja. Mejor si os lleváis alguna barrita o algo de comer en la bolsa para empezar a recuperar. Sin colas en guardarropa y alguna aglomeración para salir del recinto de llegada. Vuelta en metro rodeados de miles de corredores (imagen de ejército de Pancho Villa en franca retirada).

CONCLUSION: Un maratón es duro. El segundo maratón en un mes sabía que lo sería más. Pero correrlo enfermo hace que la visión pueda ser un tanto deformada. Por organización y recorrido (bases de una maratón) nota muy alta. Pero demasiada gente para mi idea de lo que es una carrera. El hecho de juntarse tanta gente hace que todo sea mucho más impersonal. Es la única en la que no he cruzado palabra con nadie (aparte de Sorry!, Excusez-moi! en las tanganas de avituallamiento). Durante la carrera pensaba que en la del Mediterrani éramos 280 maratonianos dando vueltas a un circuito (pocos, y dando vueltas se supone que es lo peor) pero eso es mucho más parecido a correr un Campeonato del Mundo o unas Olimpiadas (pocos y dando vueltas a un circuito) que la marabunta de París (Londres, Berlín o Nueva York, es igual). Lástima que la playa de Gavà no es París. Habrá que convivir con ambas cosas, correr maratones a escala humana y deportiva (MCD!!) para medirse deportivamente y correr las grandes para hacer turismo sin demasiado afán competitivo.

Una última reflexión: en la marató BCN 2009 murió un corredor. En París 2010, otro. He compartido salida con dos corredores que no sólo no llegaron a meta, sino que no podrán contar porqué. Descansen en paz.

Pienso que se está frivolizando mucho una prueba como la maratón. A los organizadores, fabricantes de material, revistas, etc  les interesa “vende maratón” porque es una prueba mítica y que reporta grandes beneficios económicos. Somos los corredores los que debemos ser conscientes que la maratón ha de ser el final de un largo camino en que el cuerpo se va adaptando a correr cada vez más rápido, durante más tiempo. La cantidad de gente que oigo que hace su primera media y ya piensa en correr la maratón de Nueva York es para asustarse. Cada vez tengo más claro que, si no eres capaz de bajar de 4h, ni lo intentes. Hay montones de carreras más cortas y asequibles donde ir ganando experiencia. En París, vi gente pasando la media maratón…en tres horas!!!. Acabarían en 6h o más. ¿Tiene sentido? Decir que has acabado una maratón tiene mérito si lo has hecho en un tiempo adecuado a tu edad y sexo. Con una semana de tiempo la acaba hasta mi tía, la coja. Démosle valor al crono (sin que sea lo único importante) y, probablemente, muchos corredores se den cuenta que acabar tiene mérito pero no a costa de horas y horas trotando contra tu salud.

Una maratón…y DOS!!!